Después de un montón de tiempo desaparecido en combate Coentrao volvió al once titular en Pamplona y su máxima aportación a un partido sin historia fue una ida de olla que terminó en tarjeta roja. Hasta ese momento su presencia fue una mera anécdota porque ni Osasuna apretó por su banda-bueno, por ninguna-, ni el portugués fue demasiado decidido a la hora de sumarse al juego ofensivo de los de Ancelotti. El técnico italiano, siguiendo su criterio de no querer mosquear a ninguno de los suyos, tuvo palabras de elogio para el defensa en su comparecencia ante la prensa posterior al insulso partido.
El caso es que entre problemas personales, lesiones musculares, rumores sobre traspasos y demás, el lateral más caro en la historia del Madrid no juega un pimiento. Su agente, el todopoderoso Mendes, saca pecho por los despachos presumiendo de múltiples ofertas por su pupilo, pero lo cierto es que nadie se acerca al Bernabeú con la pasta...y mucho menos con la pasta que Mourinho se empeñó en pagar por él.
Yo no dudo de que Coentrao, internacional con su país, sea un buen lateral, pero lo que tengo claro es que no se está tomando en serio su estancia en el Madrid y me sorprende la permisividad que el club está teniendo con un futbolista poco comprometido con la entidad y que resta más que suma. Entiendo que Florentino quiera recuperar al menos un parte de esta ruinosa inversión, pero ningún dirigente en su sano juicio va a hacer una oferta suculenta por un futbolista que lleva dos temporadas y media de vacaciones bien remuneradas en Madrid.
Ancelotti, como todos los entrenadores, es egoísta y quiera tenerlos a todos aunque sea para hacer bulto, pero teniendo a Marcelo como indiscutible y a Arbeloa y Nacho como recambios solventes el Madrid está tardando en buscar un destino a un jugador que sale poco y cuando sale no está a la altura de este club. Darle minutos a Coentrao por delante de Nacho, por poner un ejemplo, es un mensaje nefasto para un vestuario que puede entender que no hace falta estar al 100% comprometido para que el entrenador te dé minutos.
