Al fútbol se puede jugar de muchas formas, todas válidas si se hacen bien. El Inter de Mou en el Camp Nou concedió en 90 minutos solo 4 ocasiones de gol. Eso es defender bien. El Chelsea del 2012, concedió más de una decena, eso es defender mal. El Barça del 2010 generó pocas y el del 2012 muchas. Mismos estilos, diferentes resultados. Tanto en el juego como en el marcador
Ahora que el marcador le ha ido mal a Guardiola han salido incultos futbolísticos que ,más allá de la posible inquina personal hacía Pep, manifiestan que el juego basado en el control del juego a través de la pelota y la posesión no sirve, ya no es útil en el fútbol moderno y se tiene que replantear un cambio.
La primera pregunta que nos surge es como se puede jugar al fútbol sin la pelota. Sin que alguien la tenga más que el otro. Pero sí, esto es una obviedad. Y como cada uno puede jugar como quiera, la principal cuestión es si nosotros, si el Barça debe o no seguir jugando como implantó Johan en el 88.
Ustedes sabrán quien es anticruyfista haciendo la siguiente prueba. Cuando se ganaba decían que el modelo no lo impuso Johan que el Barça ya lo hacía antes( ya saben Venables, Lattek, Aragones, etc). Ahora que se pierde, dicen que hay que alejarse del Cruyfismo. A esos ni escucharles. Hablan desde el odio.
A los que dan motivos futbolísticos, solo hay que recordarles lo que se decía en el 2008. En el fin de la era de Frank, la gente pedía dejar atrás el cruyfismo. O pedía nuestro presi, pero también lo pedía gente diciendo que el fútbol había cambiado, que se imponía el juego físico, de transiciones cortas y rápidas y de mucha fuerza. La pelota, parecía secundario.
El Barça durante 5 años demostró lo contrario. Cada vez que un equipo que juega como nosotros , o pretende hacerlo con nuestro modelo, pierde se le discute la idea. No se le discute el como. Sino el que. Cuando un equipo defendiendo pierde no pasa nada. Se achaca a la mala calidad.
Todas las ideas son válidas. Y todas han ganado y perdido. Se trata de hacerlo bien o mal. Obviamente, es más divertido ganar jugando a lo nuestro que a lo de los demás. Quizá también es más difícil. Pero es la nuestra idea, se ha construido algo muy grande alrededor de ella y no es momento de cambiarla.
Quien no crea que se baje. A los Carol de turno, decirles que se callen, que miren el museo y sumen cuantas de las copas que hay allí se han ganado jugando a lo que ellos dicen que ya no vale. Luego, que vayan a casa y piensen cuántas se han perdido jugando a otra cosa. Por último invitarles a pensar si cuando perdían jugando a lo nuestro se divertían. Y si siguen sin creer, chillaremos más fuerte para que no se oigan. Porque…
No sabéis cuanto le demos al cruyfismo!!!
