- Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo, ni siquiera yo.
- Vale.
- Si tienes un sueño, tienes que protegerlo. Las personas que no son capaces de hacer algo te dirán que tú tampoco puedes. Si quieres algo ve a por ello y punto.
Will Smith aconsejó a su hijo en la emocionante En busca de la felicidad y, como la realidad siempre supera a la ficción, Simeone, el macho alfa de la manada atlética, ha convencido a su hinchada de que en la vida siempre hay que creer y que nunca, jamás, deben dejar que nadie, sea quien sea y se llame como se llame, les diga que no pueden hacer algo. Las personas que no son capaces de hacer algo se pasaron un año entero ninguneando a su equipo, diciéndole a los atléticos que no podían, pero Cholo y sus jugadores fueron a por ello, persiguiendo un sueño en el que nadie, excepto ellos, acertaban a creer.
Les dijeron que no podían ganar la Europa League en Bucarest, pero lo hicieron. Les dijeron que no podían ganar la Copa al Madrid en su campo, pero lo hicieron. Les dijeron que no podían pelear la Liga con los dos de siempre, que el Atleti se caería, pero ahí sigue, líder y resistiendo. Les dijeron que no podían eliminar al Milán de las siete Copas de Europa, pero lo hicieron. Les dijeron que no serían capaces de tumbar al Barça de Messi, pero el cholismo demostró todo lo contrario. Les dijeron que no podrían con el Chelsea después de que Mourinho plantase un autobús en el Calderón, pero lo hicieron. Les dijeron que no podrían volver a jugar una final de Copa de Europa después de 40 años, porque para eso tendrían que alinearse los planetas del universo, pero lo hicieron.
Y ahora les dirán que tampoco pueden ganar al Real Madrid una final de Champions en Lisboa, pero Simeone y sus guerreros tienen un sueño y seguirán protegiéndolo, aunque las personas que no son capaces de hacer algo les digan que no pueden. Ellos quieren algo e irán a por ello. Y punto. Viven el mejor momento de sus vidas y disfrutan del camino de los elegidos, de los valientes que superan obstáculos y se sienten orgullosos de soñar despiertos, en busca de la felicidad. 'Con humildad, esfuerzo y trabajo. Y si hay que sufrir, se sufre'. No se confudan: el Atlético no es un equipo, es mucho más. Es un estado de ánimo. Una anomalía en Matrix, con menos dinero que muchos pero con más ilusión que todos. Es la demostración de que, en el fútbol y en la vida, hay que creer. Y este entrenador y estos jugadores creen más que nadie. Se entregan en cuerpo y alma. Honran la camiseta que llevan y la riegan con su sudor. Ser campeón no es una meta, es una actitud. Y este Atlético, pase lo que pase, ya ha ganado. Su mensaje es claro como una mañana de primavera: De ilusiones se vive. Y con cojones, se consigue.
